viernes, 19 de septiembre de 2008

GRUTAS DE SALAMANCA

Un paisaje serrano y tranquilo, donde impera la naturaleza, se disfruta en Aiguá, al norte de Maldonado. Ya desde la ruta interbalnearia- la 39- la mirada se pierde en las sierras que se juntan en el horizonte.En Aiguá se realiza la tradicional Fiesta del Jabalí, en la que los aficionados de la caza desafían a la suerte. Es común ver pieles de jabalíes, que se muestran como trofeos, colgando en alambrados sobre las carreteras.




Por la ruta 13, de balasto, en el kilómetro 188, se encuentran las Grutas de Salamanca. Una angosta senda de piedra, a través de una galería de helechos y arbustos silvestres, guiará hasta la cima, desde donde se divisa la inmensidad del valle. Las grutas, producto de la erosión subterránea, están rodeadas de árboles como la envira, el canelón, la aruera, la caroba, el guayabo, la coronilla y hasta el limonero; y entre los animales que la pueblan hay mulitas, guazubirás, zorros, tatúes y liebres. Dentro de la gruta se oyen los estridentes sonidos de los murciélagos. La especie Desmodus Rotundus o vampiro común es la principal habitante de las grutas. Este murciélago, robusto, se caracteriza por tener los incisivos superiores más grandes y afilados.A través de las grietas de las grutas impregnadas de moho, se filtra agua limpia y transparente. La mayor parte de las grutas abarca un área superior a los mil metros cuadrados y está asociada a la legendaria trayectoria de un bandido llamado Lemos.Según cuenta la leyenda, el matrero escondía los botines de los saqueos de estancias en las grutas. Se dice que al fondo de la cueva principal - llamada "El Salón"– y sobre la derecha, era la guarida de Lemos, con paredes socavadas en pequeños nichos naturales, morada de numerosas colonias de murciélagos. El matrero quedó herido en el último enfrentamiento con la autoridad. Se desconoce el final que tuvo su vida, aunque sigue viva la creencia popular de que el tesoro de Lemos se encuentra allí, intacto, protegido por la vegetación enmarañada de Salamanca.Quienes quieran disfrutar más de una jornada en la gruta, tienen un espacio para acampar, un parador y baños.

martes, 16 de septiembre de 2008

HISTORIA Y TURISMO

AIGUA

Sobre el valle de Aiguá, se alza imponente y melodioso el pequeño pueblo del mismo nombre, una localidad que nació dentro del área geográfica del pago indígena de la "Igua" o "Aleigua", como solía llamarse en los años de la colonia.La historia de Aigua se inició en el año 1774. Por disposición del Rey de España las tierras fueron adjudicadas a Jerónimo Muniz, quien vendría a ser el abuelo de Margarita Muñiz.Doña Margarita donó los terrenos para la "instalación y fundación de un pueblo" el 21 de noviembre de 1892. En 1906 se reconoce oficialmente a Aiguá como pueblo. Cincuenta años después se le otorga la categoría de ciudad.El viajero tiene en Aiguá no sólo la posibilidad de beber su historia, sino también de maravillarse. En sus alrededores se alzan, majestuosas, las Sierras de Aiguá. Junto a las Grutas de Salamanca se constituyen en un paraje de belleza incomparable. A esta zona de sierras y grutas con abundante vegetación se accede por caminos sinuosos que, en su recorrido, ofrecen un paisaje silvestre de enorme atractivo.






En Aiguá la naturaleza invita a ser descubierta. Las sierras esperan al viajero excursionista para insuflarle vida y liberarlo de estrés. Los montes nativos son verdaderas reservas de flora y fauna. Las Grutas de Salamanca, el Cerro de la Bola o el Arroyo Aiguá son algunos de los lugares donde se pueden encontrar estos tesoros naturales.La pequeña ciudad cuenta con servicios básicos para el viajero. Hay una agencia bancaria, estación de servicios, atención médica, restaurantes, y hoteles y establecimientos que ofrecen paseos organizados a pie o sobre el lomo de un caballo.Un atractivo en Aiguá son sus productos naturales. Muchas familias se dedican a la elaboración de miel, mermeladas, quesos y vinos. Sin aditivos ni conservantes. Las artesanías ofrecidas por los artistas locales llaman la atención por su meticulosa belleza. Hay bombillas y mates exóticos, juguetes de madera, y pinturas que reflejan la belleza del entorno paisajístico y su fauna.Si el viajero llega a la ciudad en mayo o septiembre no puede perderse la Fiesta del Jabalí. Una tradicional celebración que organiza todos los años uno de los vecinos más connotados de la localidad y que ocupa tres jornadas y se complementa con espectáculos populares.
SITIOS DE INTERESGrutas de Salamanca Las Grutas poseen un interés geológico. Son el producto de la erosión a lo largo de miles de años. La mayor de ellas cuenta con un área superior a los 1,000 metros cuadrados, y se encuentra asociada a la legendaria trayectoria del bandido Lemos. En la antesala a las Grutas se encuentra el Parque Municipal. Aquí hay parrilleros y un Parador junto a un hermoso entorno serrano.Cerro CatedralTiene 513 metros de altura. En su cima hay un pilar que marca el punto más alto del país. Desde esta cima se observa una panorámica maravillosa. Se divisa al Oeste las Sierras de Minas, al Este la ciudad de Rocha, y el extraordinario paisaje de los alrededores de Maldonado.